Aunque los conceptos de upskilling y reskilling se refieren en ambos casos a mejorar la formación, lo hacen con enfoques diferentes: mientras el primero se refiere a enseñar a un trabajador competencias nuevas para optimizar el rendimiento de sus tareas, el segundo se refiere a formar a una persona para adaptarla profesionalmente a un puesto diferente.
Antes de ver en qué se diferencian, veamos en qué consisten cada uno.
Qué es el upskilling
Por upskilling se entiende el proceso que busca adquirir nuevas habilidades y conocimientos de forma que los empleados son capaces de incrementar y mejorar su rendimiento y productividad facilitando la promoción interna dentro de la propia compañía.
Un concepto que puede desarrollarse desde dos estrategias diferentes: los programas de capacitación con los que las compañías buscan avanzar en un puesto concreto o los planes de desarrollo personal con cada persona empleada para mejorar su productividad y rendimiento.
Qué es el reskilling
Por otro lado, el reskilling se refiere al reciclaje o reaprendizaje profesional, en lo que se incluye, como comentábamos anteriormente, la formación de los empleados para desarrollarse en tareas diferentes.
Un reciclaje para funciones nueva en la misma compañía con la que las empresas buscan anticiparse a hipotéticos imprevistos, así como la diferenciación de competencias.
Con esta formación se intenta que los empleados conozcan áreas nuevas u otras competencias novedades. Cursos, calificaciones o certificados son algunas de las estrategias que forman parte del reskilling.
Upskilling y reskilling: diferencias
Una vez que conocemos a qué se refieren ambos términos, analicemos sus diferencias.
Tal y como hemos comentado al principio, ambos difieren en el objetivo de aquello en lo que coinciden: la formación.
El upskilling enseña a un empleado nuevas competencias mientras que el reskilling busca formar a un empleado para un puesto nuevo en la empresa.
Es decir: el upskilling crea empleados con mayor grado de especialización y el reskilling con mayor grado de versatilidad.
Otra diferencia radica en el enfoque. El reskilling pone el foco en la adaptación y diversificación de nuevas tareas mientras que el upskilling lo hace en la especialización y desarrollo profesional en un campo específico.
Asimismo, existen igualmente diferencias en la aplicación. El reskilling prepara a los empleados para áreas distintas o roles diferentes, mientras que el upskilling mejora la eficiencia o productividad en el mismo rol o área.
Beneficios de upskilling y reskilling
Ambos conceptos sí que coinciden en una serie de ventajas que aplican tanto a las personas que trabajan como a las empresas.
Por un lado, se promueve una cultura de aprendizaje continuo que genera que tanto las compañías como quienes trabajan en ellas pueden alcanzar mayor grado de versatilidad, así como mayor capacidad de adopción a retos del futuro.
Asimismo, también supone una reducción de costos al capacitar a los empleados mejorando sus conocimiento y habilidades, lo cual implica que los resultados de la empresa pueden mejorar.
La retención de talento también opera como una ventaja generando además un alto grado de compromiso con el empleado al ser consciente de que se ha apostado por él. Una cuestión que también mejora la imagen de la empresa, ya que trasciende hacia afuera la apuesta por el desarrollo profesional de la plantilla.
Implementación de reskilling y upskilling
La implementación de cualquiera de estos dos modelos tiene que contar con una serie de pasos para conocer cómo implementarlos.
Lo primero sería conocer qué necesidades existen y, en función de la urgencia que pueda existir, priorizarlas. Posteriormente, la evaluación de las competencias de la plantilla para conocer tanto las fortalezas como las áreas de mejora.
El diseño de cursos formativos o la incorporación de herramientas que fomenten la formación son pasos previos antes de medir los resultados para conocer el impacto de los programas.
De igual manera, otra forma de avanzar en estos modelos formativos pasa por el fomento del aprendizaje continuo dentro de la empresa.
