Redacción
En septiembre del año 2000 se fijaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio, en la sede de Naciones Unidas, ocho objetivos con los que 192 países se comprometieron para acabar con la pobreza extrema en 2015.
¿Cuáles eran estos objetivos y cómo está su consecución en este momento? Veámoslo:
– Reducir a la mitad las personas que viven con menos de 1 dólar al día.
– Garantizar un trabajo decente.
– Reducir a la mitad las personas que padecen hambre.
¿Qué hemos hecho?
– Se ha reducido en 600 millones el número de personas que viven con menos de 1,25 dólares al día.
– Entre 1990 y 2008 la pobreza se ha reducido del 47% al 24%, a pesar del crecimiento de la población mundial.
¿Qué falta por hacer?
– Todavía hay 850 millones de personas que pasan hambre en el mundo.
– La desnutrición infantil sigue siendo un problema. En 2010, casi 1/3 de los niños de Asia meridional pesaba menos de lo normal.
– Asegurar que todos los niños y niñas puedan terminar un ciclo completo de enseñanza primaria.
¿Qué hemos hecho?
– Entre 1999 y 2009 se han escolarizado 43 millones de niños en el mundo.
– La tasa de escolarización en el África Subsahariana ha pasado del 58 al 76%.
– Algunos de los países más pobres son los que más han avanzado en el acceso a la enseñanza primaria universal.
¿Qué falta por hacer?
– Aún faltan 61 millones de niños por escolarizar en el mundo, más de la mitad de ellos viven en África subsahariana
– Los jóvenes analfabetos superan los 120 millones.
– Eliminar las desigualdades entre sexos en la enseñanza, a todos los niveles.
¿Qué hemos hecho?
– Hemos conseguido la igualdad entre niños y niñas en el acceso a la educación primaria.
– En 2012, las mujeres ocuparon el 19,7% de los escaños parlamentarios mundiales.
– 117 países incluyen leyes sobre igualdad salarial.
¿Qué falta por hacer?
– Apenas 9 de los 151 jefes de Estado electos y 11 de los 192 jefes de gobierno son mujeres.
– Las mujeres representan 2/3 de los analfabetos en el mundo.
– Más de la mitad de la mujeres que trabajan lo hacen en empleos vulnerables e inseguros.
– Reducir en dos tercios la mortalidad de los niños menores de cinco años.
¿Qué hemos hecho?
– Cinco de nueve regiones en desarrollo han reducido la mortalidad de menores de 5 años en más de un 50%.
– En 20 años, la cantidad de muertes de niños menores de 5 años ha disminuido de 12,4 millones de muertes anuales a 7,6.
– Las muertes por sarampión han caído un 74% en todo el mundo.
¿Qué falta por hacer?
– Hacer frente a enfermedades evitables como la neumonía, la diarrea y la malaria es clave para reducir la mortalidad infantil.
– La educación de las madres es también fundamental.
– Reducir en tres cuartos las mujeres que mueren durante el embarazo o el parto.
– Lograr el acceso universal a la salud reproductiva.
¿Qué hemos hecho?
– Desde 1990 hasta 2012 ha habido un descenso de 47% en la mortalidad materna.
– En 10 años los partos atendidos por personal sanitario han aumentado del 55 al 65% y la mujeres que recibieron cuidados prenatales aumentaron del 63 al 80%.
¿Qué falta por hacer?
– Cada minuto sigue muriendo una mujer en el mundo debido a complicaciones derivadas del parto – es decir, más de medio millón al año.
– La cobertura sanitaria sigue siendo baja en África subsahariana y Asia meridional, regiones donde se concentran a mayoría de las muertes.
– Detener y comenzar a reducir la propagación del VIH antes de 2015
– Conseguir, para 2010, que todas las personas puedan acceder a los tratamientos contra el VIH
– Detener y comenzar a reducir la incidencia de la malaria y otras enfermedades graves antes de 2015.
¿Qué hemos hecho?
– Desde diciembre 2009 1,4 millones de personas más recibieron tratamiento antirretrovirales para el VIH o el SIDA. Es el incremento más alto jamás logrado en un año.
– Gracias al tratamiento con antirretrovirales, desde 1995 se han evitado 2,5 millones de muertes en países de bajos y medianos ingresos.
– En la última década se han evitado 200.000 muertes por malaria al año.
– Hemos reducido en un 50% la infecciones por malaria en 43 de los 99 países donde esta enfermedad es endémica malaria.
– Hemos tratado con éxito 46 millones de pacientes con tuberculosis.
¿Qué falta por hacer?
– 16,6 millones de niños han perdido al menos a uno de sus padres debido al VIH, gran parte de ellos vive en el África subsahariana.
– El VIH sigue siendo la principal causa de mortalidad entre las mujeres en edad reproductiva de todo el mundo.
– La mitad de la población mundial todavía corre riesgo de contraer la malaria.
– Sigue faltando una vacuna contra esta enfermedad que es la causante de la quinta parte de la mortalidad infantil.
– Incorporar los principios del desarrollo sostenible a las políticas nacionales e invertir la pérdida de recursos naturales
– Disminuir la pérdida de la biodiversidad
– Reducir a la mitad las personas que no tienen acceso al agua potable y a la saneamiento
– Mejorar la vida de al menos 100 millones de habitantes de tugurios para 2020
¿Qué hemos hecho?
– En 2010, el 89% de la población mundial, cerca de 6.100 millones de personas, han podido acceder a agua potable. En 2015, llegará al 92%
– Hemos mejorado las condiciones de vida de más de 200 millones de personas viviendo en tugurios.
– 1.800 personas más, han podido contar con servicios de saneamiento básicos.
¿Qué falta por hacer?
– 2.600 millones de personas continúan sin acceso a la sanidad.
– 17.000 especies de plantas y animales están en peligro de extinción.
– Los niveles atmosféricos de las sustancias que destruyen la capa de ozono podrían multiplicarse por 10 para el 2015.
– Fomentar un sistema comercial abierto y no discriminatorio.
– Aumentar la ayuda al desarrollo a los países comprometidos con la reducción de la pobreza
– Aliviar la deuda a los países más pobres – Proporcionar acceso a los medicamentos a un precio asequible
– Facilitar el acceso a las nuevas tecnologías, especialmente la de la información y las comunicaciones.
¿Qué hemos hecho?
– El alivio de la deuda a los países más pobres y su transformación en fondos públicos destinados a combatir la pobreza que han tenido un impacto positivo en el desarrollo de muchos países.
– La puesta en marcha de nuevos mecanismos de financiación a través de alianzas público-privadas, que ha permitido notables progresos especialmente en al ámbito de los de medicamentos.
¿Qué falta por hacer?
– Existen importantes déficits en los compromisos de Ayuda Oficial de Desarrollo, en particular con los países menos adelantados y con África.
– Se ha progresado muy poco en materia de comercio.
– Debe aumentarse la disponibilidad y el uso de medicinas y su acceso a bajo costo o sin costo.
– Poner al alcance de todos los beneficios de las nuevas tecnologías.
En definitiva, los Objetivos de Desarrollo del Milenio están marcando una auténtica diferencia en la vida de la gente. Pero falta mucho por hacer y, sobre todo, ¿qué pasará después de 2015? ¿Cuáles serán las prioridades para tener un mundo mejor? Hablaremos de ello esta misma semana, en la parte II de este post.
