Sofía Montes Díaz-Rato – RC y Sostenibilidad
Las crisis humanitarias no están disminuyendo. 3.5 mil millones personas han sido afectadas por emergencias humanitarias desde el 2000. 65 millones de personas en el mundo están actualmente desplazadas; 21,3 millones de las cuales tienen estatus de refugiados según INHCR y 2,3 son niños que viven en países vecinos. Aunque sea difícil de verlo, la tecnología cumple un papel importante en este tema y su potencial sirve para impactar de manera positiva en la vida de estas personas y mejorar su calidad de vida.
GSMA define un desastre como una crisis humanitaria en un país, región o localidad donde un acontecimiento adverso importante (ya sea natural o provocado por el hombre) tiene un impacto negativo en la vida humana, el medio ambiente, la sociedad, los servicios esenciales y la infraestructura. Pueden necesitar una respuesta nacional o internacional, lo que indica que su impacto es lo suficientemente grave como para contar con una única entidad, organización o empresa.
¿De qué sirven los operadores móviles en estos eventos? Recientes investigaciones de la IFRC, Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, sugieren que un 90% de las vidas salvadas después de un desastre se salvan gracias a la gente local, por ello la escala y la presencia de las redes móviles es imprescindible para conectar a la gente y ofrecer acceso a información fundamental para apoyar la respuesta inmediata. Debemos saber que la industria de telecomunicaciones de alrededor del mundo tiene como fin proteger su infraestructura, negocio y empleados, pero también quiere encontrar formas de sus redes, tecnología y experiencia para proteger y preparar a las comunidades en dónde trabajan.
La Carta de Conectividad Humanitaria de GSMA es una iniciativa que abarca unos principios adoptados por todos los miembros del Operador de la Red Móvil (Mobile Network Operator). Busca, en primer lugar, mejorar la coordinación dentro y entre los operadores de redes móviles antes, durante y después de un desastre. También insiste en escalar y preparar actividades de preparación y respuesta en toda la industria para permitir una respuesta más predictible. La alianza entre la industria móvil, el gobierno y el sector humanitario tiene un peso importante en este proyecto.
Es básico que los Operadores continúen mejorando sus habilidades para hacer frente a las crisis humanitarias y, así, proteger sus negocios y para garantizar que sus clientes y comunidades circundantes sean atendidos y apoyados en lo posible. No obstante, esto no lo puede hacer sólo un sector. La industria de la telefonía móvil está progresando en el desarrollo de servicios y soluciones innovadoras para mejorar la resistencia de las redes.
La industria de la telefonía móvil está progresando en el desarrollo de servicios y soluciones innovadoras para mejorar la resistencia de las redes
Dentro de los miembros la Carta de Conectividad Humanitaria están Grupo Axiata, Globe, Eisalat o Telefónica, entre otros. Telefónica se une en Marzo de 2016 junto a Zain Group y Millicom. En primer Informe Anual sobre la Carta de Conectividad Humanitaria, Telefónica ha aportado su experiencia en el terremoto de Chile y ha seguido desarrollando y mejorando su plan de continuidad de negocios que incluye simulaciones periódicas y simulacros o variaciones en las facturas de los clientes.
Los operadores móviles de Méjico, AT&T, Telcel y Telefónica Movistar han anunciado su compromiso con We Care Iniciative, apoyando los principios de la Carta de Conectividad Humanitaria para colaborar en la adopción de medidas preventivas con las autoridades competentes para suavizar el impacto de los desastres naturales para los usuarios de teléfonos móviles. También se han unido para estandarizar los mensajes que se usen durante las emergencias, usando como referencia: #NosImportaMéxico, para facilitar guía a la población.
Es difícil prevenir emergencias humanitarias, pero se puede aportar mucho por parte de los Operadores de Red Móvil después de un desastre natural. Ofrecer wifi en los campamentos o la propia red es una posible puerta hacia la comunicación con familiares y amigos. También podrán obtener más información de lo sucedido, sobre la ruta que tienen por delante, sobre el país al que se dirigen o el acceso a servicios de rescate.
