De las ya tradicionales reuniones con las salas de “telepresencia”, que necesitan de bastantes recursos previos, se pasan a utilizar los hologramas de una forma mucho más sencilla y rápida para colaborar con nuestros interlocutores, fusionando el mundo real con el virtual.
Con la tecnología 5G y el Edge computing se pueden transmitir objetos 3D de alta resolución en tiempo real, permitiendo una colaboración fluida y sin interrupciones en la experiencia del usuario.
¿Cómo funciona?
Cada usuario es capaz de generar su propio holograma utilizando solo la cámara selfie de su móvil, democratizando el acceso a esta tecnología innovadora. Con la IA generativa, incluso se puede experimentar el contacto visual y las expresiones faciales, lo que hace que la experiencia sea aún más realista y envolvente.
Una de las cosas más interesante es poder compartir y demostrar modelos3D en un entorno real o virtual mientras compartes reunión con el resto de participantes como hologramas realistas. Esto permite sentir la presencia de los demás como si se estuviera en la misma sala, lo que hace que las reuniones sean más productivas y efectivas que nunca.
Dejar atrás los retrasos, los malentendidos y las limitaciones 2D, son algunas de sus ventajas. Tienen un sinfín de aplicaciones en educación colaborativa, la industria de la moda, grandes eventos deportivos, diseño colaborativo, etc.
Las llamadas holográficas, 5G y Edge Computing
La combinación de tecnologías como el 5G, el Edge Computing y la fibra son claves para mejorar la experiencia de inmersión y posibilita el sistema de telepresencia holográfica con captura 3D, para ser “teletransportado” en tiempo real a entornos de realidad aumentada y realidad virtual.
5G
Gracias a las capacidades de la conectividad 5G se puede desarrollar una plataforma para renderizar contenido multimedia en dos dimensiones (2D) y transformarlos en hologramas tridimensionales en un entorno de realidad virtual, aumentada o mixta (VR, AR o XR). Este reto supera las limitaciones que había hasta el momento para crear y transmitir imágenes y vídeos 3D realistas, usando simplemente la cámara selfie del dispositivo móvil.
De la misma forma, soluciona los problemas existentes previos relacionados con la latencia y el ancho de banda en la red, que impedían el movimiento realista y pulido de los hologramas proyectados en las llamadas holográficas.
Edge computing
La captura y generación de un video volumétrico suponen cantidades masivas de información que son procesadas de forma local en un primer instante para generar un avatar 3D de la persona en tiempo real. Este holograma puede ser luego utilizado de dos maneras: en streaming volumétrico en directo o para creación de videos XR pregrabados.. Los centros Edge procesan toda esta información, tanto para aplicaciones de telepresencia en directo, que necesitarían ser accesibles sin apenas retardo, como para la renderización o generación de grabaciones de alta calidad, que podrían ser vistas en cualquier momento de forma offline.
La capacidad de procesar grandes volúmenes de datos permite experiencias de streaming inmersivo de ultra baja latencia. Los servidores escalables facilitan que el holograma se envíe a todas las personas que se conectan a la telepresencia vía 5G y que sea compatible con la mayoría de dispositivos del mercado.
La telepresencia holográfica acerca a las personas sin importar dónde estén y las sitúa frente al usuario de la aplicación ya sea desde un pc, desde una Tablet o incluso con unas gafas de realidad virtual o aumentada aportando, con esta última, una sensación de presencia en tiempo real única.
Poder interactuar en tiempo real provoca que esta experiencia se pueda aplicar a muchas utilidades en la vida actual de las personas, desde presentaciones holográficas, educación inmersiva, herramientas colaborativas, entrevistas en estudios virtuales, hasta visitas de celebrities, avatares personalizados o guías virtuales.
