Ya sea para reducir carga laboral, acelerar la toma de decisiones, desarrollar potencial o simplemente cubrir por vacaciones, el empoderar está presente en nuestra vida laboral y personal. ¿No les convence? Aquí les dejo unos ejemplos: Encargarse de un proyecto, tomar una operativa, ascenso o cambio de rol, cubrir a un compañero, encargarse de organizar un cumpleaños o llevar a los niños al cole.
¿Y qué es eso de las carreras? La metáfora
La carrera de postas o relevos en atletismo consiste en una competencia de equipos compuestos de cuatro corredores. Cada corredor completa una distancia y transfiere una posta (llamada testimonio) al siguiente corredor y así sucesivamente.
En resumen, un grupo de personas que corren e intercambian algo, si el intercambio no se da con éxito impacta perjudicando el resultado ¿Se te hace familiar?
Los cuatro momentos
Nos centramos en el momento de intercambio del testimonio, el cual no se lanza simplemente, por contrario, se asegura y es así podemos identificar 4 momentos.
- Momento 1: El nuevo corredor se prepara para recibir el testimonio, va calculando.
- Momento 2: El corredor posiciona el testimonio en la mano del nuevo corredor.
- Momento 3: Ambos corren juntos asegurando el testimonio.
- Momento 4: El nuevo corredor ya tiene el testimonio, acelera y continúa la carrera.
¿Cómo podemos usar esos cuatro momentos para empoderar?
Para ello tenemos dos agentes, el primero es el EMPODERADOR, que es la persona que tiene la autonomía, el conocimiento, la experiencia (el corredor que lleva el testimonio) y el segundo es RECEPTOR que es quien o quienes reciben el conocimiento y desarrollan autonomía (el nuevo corredor).
- Momento 1: El empoderador prepara documentación, comunica, capacita y muestra como se hace al receptor, quien debe observar, cuestionar y desarrollar la habilidad.
- Momento 2: El receptor comparte ideas, preocupaciones y participa en algunas partes del flujo, el empoderador sigue siendo el responsable y va soltando poco a poco mientras brinda feedback, generando confianza.
- Momento 3: El receptor tiene la mayor parte de la responsabilidad el empoderador aun participa en partes del flujo, está presente para resolver dudas y brinda recomendaciones.
- Momento 4: El receptor ya es autónomo y acude al empoderador en caso alguna duda particular.
He resaltado algunas palabras claves, ya que son parte de la cultura de colaboración, coordinación, confianza y trabajo en equipo necesarios para alcanzar objetivos comunes.
Conclusión
El empoderamiento está en nuestro día a día y de no ser gestionado puedes caer en retrabajos, desmotivaciones, dependencias, cuellos de botella entre otros.
La transferencia del testimonio en una carrera de relevos nos permite conocer los pasos esenciales para realizar un empoderamiento seguro.
