Mitos en todos lados: Los grandes generadores de tráfico tergiversan el caso de Corea del Sur
En los últimos meses se ha producido un animado debate sobre la contribución justa de los grandes generadores de tráfico (GGT) a la sostenibilidad de la inversión en redes. Quienes se oponen a esta contribución justa señalan a menudo el caso de Corea del Sur como ejemplo de advertencia. Sostienen que la iniciativa tuvo consecuencias negativas para el mercado y los consumidores coreanos y que, por tanto, Europa debería aprender de los supuestos errores de Corea y abandonar la propuesta. En ninguno de estos debates participaron los operadores de telecomunicaciones coreanos, el regulador o el gobierno coreanos.
Los operadores de telecomunicaciones iniciaron un esfuerzo para explicar la situación en Corea del Sur
Verdad: Corea del Sur es líder en desarrollo digital
Los operadores coreanos han publicado recientemente un informe en inglés, titulado «Myths and Truths about the IP Interconnection system» (Mitos y verdades sobre el sistema de interconexión IP), que intenta desmontar las falsedades difundidas en Europa y Estados Unidos sobre este tema. En él se critican las afirmaciones contenidas en los informes elaborados por Analysis Mason y WIK-Consult. El artículo de la Asociación Coreana de Operadores de Telecomunicaciones acusa a estos informes de tergiversar los hechos.
Algunas valoraciones son especialmente llamativas, como la afirmación de que las decisiones tomadas por el regulador coreano tuvieron un efecto negativo en el mercado de proveedores locales de contenidos, llevando a muchos de ellos a desaparecer. Por el contrario, Corea del Sur lleva años liderando todos los índices de desarrollo digital. El informe de la Asociación Coreana de Operadores de Telecomunicaciones ofrece más detalles:
- Corea es un mercado muy dinámico, con más proveedores locales de plataformas entrando en el mercado que en ningún otro país y compitiendo con las grandes empresas tecnológicas.
- Según la encuesta anual del Índice Mundial de Innovación de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), Corea del Sur es un país altamente innovador, que ocupa el sexto lugar en el mundo y el primero en Asia.
- Corea es el primer país del mundo en siete indicadores: solicitudes de patentes en relación con el PIB, PCT (Tratado de Cooperación en materia de Patentes, solicitudes internacionales de patentes) en relación con el PIB, solicitudes de diseño en relación con el PIB, investigadores en relación con la población, investigadores empresariales en relación con la población, servicios en línea de la Administración y participación en línea de la Administración electrónica.
- Las empresas coreanas de TIC se han adaptado rápidamente a la era de las plataformas y, a diferencia de la mayoría de los países, existen plataformas locales competitivas de búsqueda, mensajería, comercio electrónico, etc.
- Las plataformas coreanas están entrando en el mercado mundial centrándose en áreas que no están dominadas por las grandes tecnológicas existentes en Corea.
- La diversidad de contenidos en Corea está actualmente en su punto más alto. Historias y vídeos únicos como Parasite y Squid Games son muy valorados tanto por el público coreano como por el internacional.
- Si la diversidad de contenidos en línea pudiera medirse por el número de proveedores de contenidos, Corea tiene más diversidad que ningún otro país del mundo, con empresas locales y extranjeras compitiendo.
La diferencia entre los argumentos de que las tarifas de acceso a la red obstaculizan la diversidad de contenidos y la realidad del popular y extenso ecosistema de contenidos de Corea del Sur es sorprendente.
Más verdad: la velocidad de la banda ancha aumenta y los proveedores de contenidos han acelerado para estar presentes en Corea del Sur
La descripción de la relación entre operadores y proveedores de contenidos también suele ser errónea. Se acusa repetidamente a los operadores de perjudicar la calidad de los servicios ofrecidos a los ciudadanos coreanos al negarse a instalar cachés (CDN) en sus redes o a ofrecer conexión directa con estos proveedores. La respuesta de los operadores, aunque obvia, es interesante:
- Esto se ha descrito como una pérdida para las partes interesadas coreanas. Es necesario distinguir si la caché no se instaló porque los ISP de Corea se negaron a instalarla o porque los proveedores de contenidos (CP) globales se negaron a llegar a un acuerdo.
- Los ISPs coreanos están siempre dispuestos a instalar servidores caché en sus redes. Esto se permite a condición de que los CP paguen por el uso de la red. Instalar servidores caché en la red no significa que no haya costes.
- El gobierno surcoreano mide y publica cada año la calidad de la Internet de alta velocidad, y la velocidad de la banda ancha aumenta cada año.
- Por tanto, desde que se modificó el sistema de interconexión, no ha habido casos de operadores nacionales que hayan trasladado sus servidores al extranjero por la carga que suponen las tarifas de acceso a la red. Más bien, solo hay pruebas de que los servicios de proveedores OTT extranjeros, como Disney y Apple TV, han acelerado para estar presentes en Corea del Sur.
Interconexión: crear un ecosistema de Internet sano en un mercado de doble cara
Todas las empresas incurren en costes de explotación cuando prestan servicios. Y a todas las empresas les gustaría reducir estos costes, o les gustaría que fueran gratuitos, ya se trate de energía o de cualquier otro servicio que deban contratar con otra empresa. La idea de que la negativa de una empresa a prestar gratuitamente un servicio a otra supondría un perjuicio irreparable para los consumidores finales no tiene ningún fundamento desde el punto de vista económico. Más bien refleja que estas grandes empresas no tienen ningún interés en llegar a acuerdos, ya que pueden confiar en su extraordinario poder de mercado para utilizar estos servicios de forma gratuita.
El último aspecto digno de mención es el esfuerzo del artículo por arrojar algo de luz sobre la tremenda confusión creada en torno al mercado de la interconexión. Afirma lo obvio: la interconexión es un mercado de operadores. Cuando se legisla sobre interconexión, se legisla sobre la relación entre operadores. Los problemas surgen cuando determinados agentes que no son operadores, sino proveedores de contenidos, quieren acceder al mercado de la interconexión como si fueran operadores. La distorsión que esto introdujo en el mercado obligó al regulador coreano a aclarar que los proveedores de contenidos no son operadores, sino usuarios de Internet. El regulador clasifica a los proveedores de contenidos como usuarios masivos de Internet. Y como usuarios deben pagar por el acceso a Internet como cualquier otro usuario. El informe critica especialmente la confusión que crea el informe WIK-Consult sobre este aspecto. En palabras de los operadores coreanos:
- La afirmación de WIK de que los grandes ISP han obligado a los CAP a pagar por sus redes es incorrecta. Los pagos de cuotas de interconexión sólo se realizan entre ISP registrados por la ley y que disponen de redes de telecomunicaciones.
- Los grandes CAP pagan a los ISP por los servicios de líneas alquiladas de Internet. Se trata de una transacción en la que usuarios finales, usuarios empresariales y CAP de todos los tamaños pagan a los ISP por la conectividad a la red pública de Internet. El nivel de la tarifa se negocia de forma autónoma entre el CAP y el ISP.
El informe de los operadores coreanos termina con una frase que resume el estado del debate en Corea:
- En Corea del Sur, el precio de Internet de alta velocidad es muy bajo y la velocidad de Internet de banda ancha es una de las más altas del mundo. Esto se debe a que Internet es un mercado de doble cara, y se ha establecido un ecosistema de Internet sano en el que los usuarios finales y los operadores comparten equitativamente los costes de inversión en la red. El sistema de interconexión se considera el mínimo necesario para mantener un ecosistema de Internet sano en Corea del Sur.
Hay varias soluciones posibles para este reto, pero lo importante es comprender que se trata de un problema que hay que abordar y encontrar una solución. No hacer nada no es una opción. Y leer el informe de la Asociación Coreana de Operadores de Telecomunicaciones es imprescindible para comprender mejor la situación del mercado surcoreano y utilizarlo para informar el debate europeo de manera objetiva.