¿Sabías que tienes en la mano un arma muy poderosa para combatir el cambio climático? Sí, las comunicaciones móviles permiten reducir más de 180 millones de toneladas de CO2 al año en Estados Unidos y Europa, una cantidad equivalente a las emisiones de los Países Bajos y cinco veces más que las correspondientes a las propias redes móviles.
Estos cálculos han sido difundidos hoy en un informe elaborado por Carbon Trust que ha hecho público Global e-Sustainability Initiative (GeSI).
Pero lo más impactante del estudio Mobile Carbon Impact no son las cifras sobre la situación actual, sino las estimaciones que muestra: teniendo en cuenta el aumento previsto de conexiones M2M, esta cifra se multiplicará hasta llegar a los 500 millones de toneladas de CO2 al año hasta 2020.
¿Cuál es exactamente el impacto del Máquina a Máquina? El 70% de la disminución actual de CO2 procede de las tecnologías M2M aplicadas a los edificios, el transporte y la energía, donde los dispositivos permiten automatizar las comunicaciones sin requerir intervención humana. Y el 20% proviene del uso de los smartphones para cambiar los hábitos de vida y de trabajo. Esto procede de una investigación realizada en Corea del Sur, España, Estados Unidos, México y Reino Unido, que muestra ejemplos cotidianos como la banca móvil, los servicios para compartir hospedaje, las apps de navegación por satélite y el uso de las vídeo llamadas o la voz en lugar de las visitas a la familia y los amigos.
En el futuro, según el informe, las principales oportunidades estarán en el uso de la tecnología móvil en las ciudades, la salud y la agricultura, donde hoy el impacto es aún pequeño.
– CIUDADES CONECTADAS – Mejorar la infraestructura y la prestación de servicios públicos por parte de los gobiernos
Las principales áreas de reducción en las ciudades hoy procede del ahorro de combustible y electricidad por la iluminación de las calles, al evitar congestión del tráfico, facilitar a los conductores el aparcamiento… Todo ello mejora, además, la calidad del aire y reduce la polución.
-SALUD CONECTADA – Proporcionar atención de forma remota o en el hogar y mejorar la salud y el bienestar
La monitorización a través de la tecnología móvil de pacientes crónicos o de alto riesgo mientras están en su casa, evita viajes repetidos al hospital o de los médicos a su hogar, y reduce la estancia de las personas en el centro hospitalario.
– AGRICULTURA CONECTADA – Mejorar la eficiencia de los métodos para cultivar y aumentar los rendimientos
Las tecnologías clave para conseguir ahorrar emisiones se refieren a Sistemas de Navegación por Satélite (GNSS), sistemas de auto-guía para la maquinaria de las granjas y tecnologías que permiten optimizar el uso de los fertilizantes y pesticidas.
El impacto de los avances en la agricultura no sólo afecta al cambio climático sino también a la seguridad alimentaria, la biodiversidad, el agua… Pese a su relevancia, en el estudio se identifican varios obstáculos para su aplicación: la falta de normas comunes para el intercambio de datos entre sistemas, el coste, la formación…