¿Qué opinas de los PPAs? ¿Crees que tu empresa se va a poder descarbonizar? Y tu familia, ¿es de las que aprovecha la economía circular?
Muchos de nosotros nos quedamos en blanco ante preguntas como estas, aunque cada día sean más numerosas las noticias y las conversaciones sobre el cambio climático. ¡Te ofrecemos una guía rápida con algunos términos para no perderte!
¿Qué es la descarbonización?
Descarbonización significa dejar de usar combustibles fósiles para frenar el cambio climático. En la actualidad, el mundo genera más emisiones de las que puede absorber el ecosistema de modo natural. De ahí que digamos que es necesaria la descarbonización de la economía.
Para los que ya dominéis el tema… También se suele hablar de desacoplamiento entre el crecimiento del mundo o de una empresa del consumo de energía, para lo que es necesaria una “transición energética”. Es decir, ser capaces de producir utilizando energías más limpias y más digitalización.
La descarbonización o el desacomplamiento ya es una realidad en nuestra compañía porque desde 2015 nuestro negocio (el tráfico que “transportamos” por nuestras redes) ha aumentado un 107% mientras que nuestro consumo energético ha disminuido un 1%.
¿Qué significa PPA renovable?
Un Power Purchase Agreement (PPA) es un acuerdo de compra de energía a largo plazo, por ejemplo, 10-15 años, de energía renovable.
¿Qué ventajas tienen para nosotros este tipo de convenios? La principal es que descarbonizamos nuestra actividad y obtenemos energía a un precio competitivo y estable en el tiempo.
¿Y para la empresa suministradora? Se garantiza el cliente a largo plazo, lo que le permite, por ejemplo, lograr inversión para construir una central de energía limpia, con todo lo que eso implica como motor de progreso sostenible.
Hay países como EEUU en los que los PPA son ya muy frecuentes y ahora se están extendiendo a otros mercados. Podemos estar orgullosos porque el primer PPA de Telefónica en el mundo está a punto de ver la luz en México con una nueva planta solar.
¿Por qué hay que ser ‘carbon neutral’?
He aquí el objetivo de todos (países, ciudades, empresas…): ser “neutro” en emisiones de carbono (en inglés, carbon neutral).
Para conseguirlo, o bien logramos tener cero emisiones, algo que hoy en día no es posible, o compensamos las que generamos. De este modo no dejamos huella sobre el planeta.
¿Cómo se calculan esas emisiones en una compañía como la nuestra? A partir del consumo de energía y teniendo en cuenta tres alcances: el 1, emisiones por el uso de combustible y gases de los equipos de climatización; el 2, derivadas principalmente del consumo de electricidad en nuestra red y el 3, principalmente emisiones procedentes del uso de productos por nuestros clientes y de la compra de bienes y servicios.
Para “neutralizar” la huella de carbono podemos, por ejemplo, crear sumideros, como árboles o algas, que capturan CO2. Otra opción es comprar créditos de absorción de emisiones para financiar proyectos de reforestación.
En Telefónica tenemos la suerte de contar con soluciones “come CO2” –gestión de flotas, smart energy, cloud…-. Gracias a ellas, en España evitamos en los clientes más emisiones de las que generamos.
La economía es y debe ser circular
El concepto economía circular se inspira en la propia naturaleza, en el ciclo de la vida, donde todo es útil y se aprovecha. Aplicado a una empresa como la nuestra, la economía circular supone un cambio de paradigma en los procesos, desde la compra de productos más sostenibles, duraderos y eficientes, al diseño de servicios al cliente. ¡Es una oportunidad para conseguir ahorros e ingresos!
En la gestión de equipos ya lo estamos viendo. Por ejemplo, cuando recogemos routers usados de nuestros clientes, los reparamos y los ponemos de nuevo en el mercado. Así, evitamos el consumo de materias primas y nuevos recursos. Por ello, de cara a B2B, nos hemos propuesto impulsar el desarrollo de soluciones tecnológicas que fomenten la revolución hacia la economía circular.
Eco Rating para la sostenibilidad
El es una ecoetiqueta o sello que evalúa la sostenibilidad. Para ello, puntúa del 1 al 5 los móviles y dispositivos en función de 100 criterios.
El Eco Rating evalúa, entre otros aspectos, si los fabricantes se preocupan por las condiciones de sus trabajadores, el ecodiseño de los dispositivos, la producción de sus componentes y sustancias utilizadas, la eficiencia del embalaje y del transporte, su consumo energético, o el tiempo de carga completa de la batería y su reciclaje.
Hasta la fecha informamos sobre el Eco rating en el 71% de nuestro portfolio, en países como España, Brasil, Alemania, Reino Unido, Chile, Colombia, Argentina, Ecuador y Perú. Nuestro objetivo es extenderlo a todos los mercados y que se convierta en un estándar para toda la industria.
¿Hay algún otro término que te interese o te resulte curioso? Anímate y compártelo. ¡Elegimos aprender!