«A los 24 años, en una revisión médica rutinaria que me hicieron en la empresa, me dijeron que era diabético y que nunca podría cumplir mi sueño: subir al Everest», explica el alpinista Josu Feijoo.
Feijoo, que por entonces no sabía lo que era la insulina, no se rindió: este ingeniero vasco es el primer diabético del mundo en llegar sin ayuda al Polo Norte, al Polo Sur, a la cima del Everest y a las siete cumbres más altas del mundo, The Seven Summits. Además, está empeñado en contagiar su espíritu de superación a otros enfermos crónicos, en ayudarles a tener una vida normal. «Quiero que mi sobrina diabética pueda ir de excursión con el cole, algo hoy imposible porque los profesores no se responsabiliza por si le pasa algo».
De ahí que Josu lleve años buscando en la tecnología una herramienta para facilitarles la vida. «Por fin es una realidad. El servicio de telemonitorización de Telefónica es un regalo porque nos va a permitir llevar siempre al médico en el bolsillo, en el móvil o en el tablet, y esto va a mejorar mucho el día a día de los diabéticos».
Y para abrir camino Josu ha montado una expedición al campamento base del Everest con cuatro jóvenes diabéticos que irán equipados con este servicio. Gracias a él, estarán monitorizados por sus médicos desde España, con quienes se podrán comunicar en caso de necesitarlo.
