¿Cuánto tiempo llevas en Telefónica y qué valoración haces de este tiempo aquí?
Entré en la compañía en 1999 en el área de desarrollo sobre red inteligente de Telefónica Móviles, justo cuando nos estábamos preparando para el temido “efecto 2000”. En aquel momento parecía que todas las máquinas se iban a volver locas con el cambio de dígitos, aunque lógicamente no fue así, cientos de personas trabajamos para que eso no ocurriera. En este año del centenario yo personalmente cumplo mis “bodas de plata” en esta compañía. Mi carrera siempre ha estado ligada al mundo de la tecnología y de la transformación digital. Creo que en Telefónica la gran constante a lo largo del tiempo ha sido el cambio continuo.
He tenido la oportunidad de vivir muy de cerca la convergencia de las diferentes redes fijas, móviles y de datos; la unificación de los sistemas de gestión, atención y facturación de clientes y también la increíble transformación de nuestras capacidades de analítica avanzada e inteligencia de negocio, todo esto acompañado de una organización en continuo cambio y unos compañeros excelentes. Como decía el filósofo Heráclito, “todo fluye, nada permanece”.
¿Hay algún proyecto en Telefónica del que te sientas especialmente satisfecho u orgulloso?
Veinticinco años dan para mucho y he tenido la oportunidad de trabajar en 4 áreas muy diferentes. Primero en el área de desarrollo de servicios móviles donde pusimos en marcha el servicio Movistar Corporativo para gestionar las llamadas fijas y móviles de los clientes de gran cuenta, ahí aprendí lo que significa de verdad desarrollar sistemas en tiempo real y de misión crítica.
La segunda etapa fue muy bonita haciendo proyectos de innovación también con grandes cuentas, recuerdo especialmente los proyectos de e-Health donde tratábamos con médicos y pacientes de verdad. Ahí aprendí qué significa orientarse al cliente de verdad y entender que detrás de toda la tecnología hay personas muy diversas y que podemos ayudarles mucho. En la tercera etapa trabajé con los grandes centros de datos que dan servicio a todos los sistemas de información. El proyecto más retador fue poner en marcha el nuevo CPD de Tecno Alcalá, un gran proyecto de compañía. Ahí aprendí cómo podemos montar y gestionar nuestros súper ordenadores, que tienen una capacidad de cálculo y almacenamiento espectacular. Sólo el CPD de Julián Camarillo dispone de capacidad de alimentación energética similar a la de toda la ciudad de León.
Actualmente gestiono la unidad de Opengateway y Plataformas Digitales Globales, desde la que operamos diferentes servicios, desde apoyo a los canales digitales de la compañía, gestión de los routers de hogar, chatbots basados en inteligencia artificial, aplicaciones interactivas para la televisión y más recientemente hemos puesto en marcha el proyecto Opengateway donde estamos desarrollando alianzas con otras empresas líderes como Microsoft, Google o Amazon para ofrecer conjuntamente nuevos servicios digitales a la industria.
De esta etapa el aprendizaje está siendo cómo gestionar y optimizar procesos de desarrollo a nivel global donde ya no se trata de hacer cosas para España, sino colaborar con las áreas globales para hacer trabajos alienados con el resto de países y empezar a construir una visión de compañía más global.
¿Qué crees que ha aportado Telefónica a la sociedad?
Es evidente que un gran operador de telecomunicaciones como Telefónica forma parte de los ejes tecnológicos vertebradores de cualquier sociedad moderna, como los son los medios de transporte o las redes de generación y distribución de energía. Pero creo que Telefónica aporta algo más, especialmente en España, que es donde nace la compañía y creo que existe una vinculación especial entre la sociedad española y Telefónica. Hemos llenado las calles de cabinas, hemos levantado las aceras de todos los barrios, hemos entrado en los salones de todas las casas con teléfonos de todos los colores y diseños.
Tenemos un excelente canal de televisión y entretenimiento, y hemos construido todo el corazón de comunicación y digitalización de nuestras empresas grandes y pequeñas. Creo que más allá del rol que nos toca en la modernización de un país, en Telefónica tenemos un compromiso con la sociedad que va más allá de poner redes. Nos gusta poner pasión en todo lo que hacemos, conectar a personas y conectar con las personas y todo ello aportando seguridad y generando confianza.
¿Dónde ves Telefónica en el futuro?
Hasta ahora las personas y las empresas han sido, son y seguirán siendo los principales objetivo de atención de nuestra empresa, pero estamos en las puertas de la gran revolución de la robótica y al inteligencia artificial. Hasta el 4G nuestras redes estaban pensadas para las personas y las empresas, pero a partir del 5G nuestras redes empiezan a pensarse para los robots, elementos autónomos y la inteligencia artificial. Los vehículos autónomos, los drones, la robótica industrial y doméstica y todos los grandes sistemas de inteligencia artificial están empezando ya a generar una demanda de comunicaciones y servicios tecnológicos nunca vista. Necesitamos redes de altas prestaciones, capaces de responder tan rápido como piensa un robot y, además, todo esto debe ser programable y gestionable de forma dinámica.
No se trata sólo de tener redes súper avanzadas, nuestra forma de gestionar la red también va a cambiar radicalmente. Los robots no llaman el 1004 ni van a una tienda. Los robots usan APIs. En Telefónica nos estamos preparando en esos dos sentidos: de la mano del 5G y sus evoluciones construimos las mejores redes y de la mano de proyectos como Opengateway, nos abrimos a toda la industria mediante APIs programáticas para que los terceros, los robots, las IAs, etc. pueda construir nuevos y más avanzados servicios digitales gracias a nuestras capacidades.
¿Podrías vivir sin teléfono móvil?
Sí podría, pero la vida sería mucho más difícil. No podría capturar con la cámara momentos de la vida de mi hija en cualquier momento, no podría hablar con la familia o con amigos en cualquier parte, no podría compatibilizar como ahora la vida personal y laboral, no podría trabajar fuera de la oficina, me perdería conduciendo por sitios desconocidos, no podría hacer la compra… ¡ni meter una contraseña sin recibir un mensaje de confirmación en el móvil!
El móvil es la principal puerta de entrada al mundo digital moderno y tener esa puerta en tu bolsillo te hace la vida mucho más fácil. Esto no quita que se deba hacer un uso responsable y adecuado de los servicios digitales en general y del móvil en particular, una cosa no debe quitar la otra.
Ayúdanos a resolver uno de los grandes enigmas de la humanidad: la tortilla de patata… ¿Con cebolla o sin cebolla?
Sin duda, con cebolla y, si es posible, con huevos de corral y poco hecha. En casa la preparo sin cebolla porque no le gusta a mi hija de 9 años, pero poco a poco le voy ofreciendo cebolla en diferentes platos y en la propia tortilla… a ver si consigo que le guste.
Propón alguna idea loca que te gustaría que hiciera Telefónica en su centenario
Telefónica tiene mucha historia y detrás de esa historia seguro que la gente tiene muchas anécdotas de todo tipo. Se podría hacer un especial en Movistar Plus+ de los 100 años de historia donde la gente y los empleados cuenten anécdotas, se enseñen teléfonos antiguos, cómo se hacían ante las cosas. Telefónica forma parte de la historia de España y de muchos otros países.
Nomina a otro compañero para aparecer en esta sección
Me gustaría nominar a mis compañeros Javier Sanz Domínguez y a Nuria Fernández Varela.