Los rápidos avances tecnológicos exigen perfiles profesionales capaces de adaptarse a las nuevas demandas del mercado. De la misma forma que han cambiado los trabajos, también lo han hecho las competencias que se exigen.
En el Foro Económico Mundial planteaban ya hace unos años una cuestión llamativa: el 65% de los niños en las primeras etapas de su vida escolar tendrán empleos que aún no existen. Mientras muchos empleos están dejando de existir, otros surgen y crecen a la par que las nuevas tecnologías como el 5G o la inteligencia artificial.
En el mismo sentido apuntaba el Observatorio para el Empleo en la Era Digital al subrayar que «el 80% de los jóvenes españoles entre 20 y 30 años que encuentre empleo en el futuro próximo, ejercerá profesiones recién nacidas o que todavía se están gestando».
La digitalización y robotización de infinidad de trabajos es, desde hace años, una tendencia imparable que está transformando nuestro ecosistema laboral, produciendo la extinción de muchas actividades; y lo que es más relevante, alumbrando nuevos perfiles profesionales y poniendo a prueba nuestras habilidades y competencias para adaptarnos al espacio cambiante.
La pandemia de la Covid-19 no ha hecho más que acelerar esta tendencia y exacerbar la disrupción del empleo. Sin duda, la digitalización y la automatización se han acelerado como consecuencia del coronavirus y es difícil saber hasta donde puede llegar el irrevocable futuro tecnológico.
De la ciencia ficción a la realidad
Salvo en la literatura de ficción, nadie podía sospechar hace apenas 30 años que se fabricarían pequeños ordenadores que iban a caber en un pequeño teléfono inteligente o en un reloj de pulsera.
El diseño, la programación, la fabricación o la reparación de estos dispositivos que ahora prácticamente todo el mundo usa, precisa de personal especializado en profesiones que no existían hace pocas décadas.
Tampoco existían pilotos de unos artefactos voladores llamados drones que, desde las alturas, podían transportar mercancías, controlar los cultivos o tomar imágenes de las consecuencias de la erupción de un volcán.
Mucho menos se intuía que, gracias a la tecnología robótica 5G, podríamos ser intervenidos quirúrgicamente por un médico a miles de kilómetros de distancia. ¡Y qué decir de los coches autónomos y las casas inteligentes!
Son solo unos ejemplos de escenarios y empleos que han surgido al ritmo de la tecnología. Pero hay muchos más, algunos que empiezan a extenderse, otros incipientes y otros, a buen seguro, que aún ni podemos fantasear.
Los perfiles más demandados
La demanda de perfiles relacionados con la tecnología no para de crecer -la Comisión Europea calcula un incremento anual del 4%-, y la oferta es a todas luces insuficiente, como muestra el dato de que el año pasado el mercado europeo sufrió un déficit de 756.000 expertos en TIC.
De acuerdo con la consultora de talento y tecnología Experis, cada dos años, la demanda de perfiles relacionados con las tecnologías de la información en España se duplica.
Según el informe 2021 Tech Cities de Experis, entre los perfiles profesionales más solicitados actualmente están los de analista y científico de datos, cuya demanda se ha multiplicado por siete en cuatro años hasta alcanzar la cifra de más de 38 000 puestos ofrecidos en 2021.
Aunque es el ingeniero de software el profesional más requerido por las empresas, el pasado año se solicitaron hasta 128.000 de ellos. Presentan también un crecimiento fuerte las demandas de especialistas en ciberseguridad y de administradores de sistemas, y, en menor medida la especialización en DevOps.
El mapa del empleo
Una forma muy sencilla, visual y efectiva de conocer las profesiones digitales más demandas es consultar el Mapa del Empleo desarrollado por Fundación Telefónica.
Esta herramienta interactiva utiliza la tecnología big data para analizar la oferta laboral en España y muestra las profesiones en auge así como las habilidades más demandadas para su desempeño.
Utilizando como fuente las ofertas de empleo publicadas en Infojobs, tecnoempleo.com y ticjob.es, el ‘Mapa del Empleo’ es capaz de detectar en tiempo real los 23 perfiles digitales con mayor demanda de empleo en España, diseccionados por cada provincia.
Desarrollador de software es, con diferencia, la profesión tecnológica más solicitada en prácticamente todas las regiones, seguida de Administrador de Sistemas, Desarrollador web y multimedia, Digital Project Manager, Consultor TIC, Desarrollador Full Stack, Desarrollador frontend, Especialista en Ciberseguridad, Especialista en Marketing Digital y Analista de datos/BI, entre otras.
Nuevas habilidades y competencias
En cuanto a los conocimientos necesarios para trabajar en estos puestos, Java se impone como la más demandada. Le siguen JavaScript, cloud computing, HTML, Git, Angular, CSS, Spring Framework, SAP Business Suitey Microsoft Azure.
Además, el Mapa del Empleo ofrece a los usuarios la oportunidad de conectar con Orientador Profesional Virtual, una herramienta que ayuda de manera personalizada y da recomendaciones sobre cómo preparase para trabajar en estas nuevas profesiones
La plataforma se completa con la oferta de cursos presenciales y online gratuitos de Conecta Empleo. Hay cursos de Diseño web con HTML5, WordPress, programación con Javascript, diseño de videojuegos, Growth Hacking para que un producto digital tenga éxito o Analítica web, entre otros.
La plataforma “recaba información de ofertas de empleo; detecta cuáles son las más repetidas y, por tanto, las más demandadas; identifica cuáles son los conocimientos técnicos más comunes en las ofertas sobre cada una de esas profesiones, e indica qué cursos –más de 30.000–, tanto gratuitos como de pago, son necesarios para formar en estos conocimientos. Esto nos obliga a rediseñar la forma de enseñar”, explica Luis Miguel Olivas, director de Empleabilidad de Fundación Telefónica, respecto a su funcionamiento.