En la actualidad, hay datos que no pintan bien para la humanidad. Es probable que el calentamiento global eleve la temperatura 1° C con respecto a la media de la era preindustrial; 60 millones de personas, más que la población de España, han sido desplazadas y los delitos cibernéticos cuestan a la economía mundial aproximadamente 445.000 millones de dólares, lo que supera los ingresos de Chile.
Sabiendo esto, ¿cuáles dirías que son los riesgos globales más importantes? 750 expertos han opinado sobre ello para el Informe de Riesgos Globales 2016 elaborado por el Foro Económico Mundial con la colaboración de Marsh & McLennan Companies y otros patrocinadores como Zurich.
Según el estudio, los cinco riesgos más probables son las migraciones involuntarias a gran escala, los fenómenos meteorológicos extremos, la falta de mitigación y adaptación al cambio climático, el conflicto interestatal con consecuencias regionales y los grandes desastres naturales.
Por otro lado, el top cinco de los riesgos con mayor impacto está compuesto por la falta de mitigación y adaptación al cambio climático, las armas de destrucción masiva, la crisis de agua, las migraciones involuntarias a gran escala, los cambios en el precio de la energía (subida o bajada).
A los participantes también se les preguntó qué riesgos estaban relacionados y podrían dar lugar a riesgos en cadena. Se destacaron tres: primero, la posibilidad de que el cambio climático exacerbe las crisis del agua, con impactos incluyendo conflictos y un aumento de la migración forzosa. Una efectiva respuesta requeriría una mejor gestión del agua en respuesta al cambio climático y políticas para responder a una población en crecimiento y al desarrollo económico. En segundo lugar, la necesidad de abordar la crisis global de refugiados, poniendo un mayor énfasis en políticas que puedan construir resiliencia además de responder a la crisis inmediata. Finalmente, los riesgos derivados con la incapacidad de entender bien los retos en torno a la Cuarta Revolución Industrial y cómo esta transición afectará a los países, las economías y las personas en un momento de desaceleración económica.
Los países más vulnerables al clima suelen depender mucho de la productividad agrícola para apoyar el crecimiento y el desarrollo económico
ATENCIÓN AL CIUDADANO (DES)EMPODERADO
El estudio se refiere también a un riesgo contextualizado que atiende a las complejas dinámicas de las sociedades en la era de la digitalización y trata el fenómeno del ciudadano (des)empoderado, resultado de la interacción de diversas dinámicas. En un contexto en el que la tecnología empodera a los ciudadanos a la hora de encontrar información, conectarse con otros y organizarse, estos ciudadanos se sienten, sin embargo, privados de derechos por parte de élites distantes. El informe analiza el camino a la inestabilidad social si tanto gobiernos como empresas se embarcan en acciones represoras o en la inacción por causa de la incertidumbre sobre cómo tratar con una ciudadanía más informada, conectada y exigente, lo que podría conducir a una espiral creciente de desconfianza y respuestas más confrontacionales por ambas partes. Este apartado también analiza los beneficios que podrían disfrutar gobiernos y empresas si buscan proactivamente formas de conectarse y de dialogar con ciudadanos preocupados.