Laura Cabo Díez
La tercera edición del Congreso Nacional de Responsabilidad Social Empresarial, que se celebró en Zaragoza, se ha clausurado el pasado 25 de junio tras dos días de intenso debate. Bajo el lema, “RSE es competitividad. Una oportunidad para la empresa” este congreso se ha convertido en una referencia, contando este año con más de 400 participantes.
El congreso, que fue inaugurado por Juan Alberto Belloch, alcalde de Zaragoza, ha contado con importantes conferenciantes como Miguel Ángel García Martín, director general de Trabajo Autónomo, de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las Empresas del Ministerio de Empleo, quien fue el encargado de la primera conferencia inaugural de este congreso.
Las conclusiones de esta tercera edición corrieron a cargo de Víctor Alcalde, Director de Prevención de General Motors España y Presidente del Comité Científico del Congreso, que desarrollan a lo largo de 20 puntos los aspectos más importantes desarrollados a lo largo del congreso.
CONCLUSIONES DEL 3º CONGRESO NACIONAL DE RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL
Zaragoza, 24 y 25 de Mayo de 2012
1.- La Responsabilidad Social Empresarial es una estrategia fundamental de competitividad tanto de grandes empresas como de PYMEs. Los valores constituyen el eje en torno al cual se deben construir las estrategias de RSE, y el empresario debe liderar en primera persona la política de RSE de la empresa. Estos valores se deben de resumir en “ganar con integridad”.
2.- Algunos de los principales valores en los que soportar la estrategia de RSE de una empresa son la transparencia, la confianza, la coherencia, las alianzas estratégicas, innovación, compromiso, la visión a largo plazo y creación de sentido de equipo. La RSE constituye una de las mejores inversiones que una empresa puede hacer.
3.- El nuevo modelo socioeconómico que está surgiendo como consecuencia de la crisis, debe estar basado en comportamientos socialmente responsables de empresas, Administraciones Públicas, medios de comunicación, instituciones financieras y de toda la sociedad. La innovación social debe ser una de las claves de este nuevo modelo.
4.- No existe un único modelo de ser socialmente responsable. Hay muchas maneras de ser socialmente responsable y cada empresa debe adaptar su modelo a sus peculiaridades.
5.- La innovación social debe ser una estrategia empresarial orientada a la búsqueda de soluciones de problemas no sólo sociales, sino ecónomicos y de competitividad dentro de la empresa. La colaboración estratégica entre grandes corporaciones y pequeños emprendedores es una de las claves para la innovación social en la empresa.
6.- La innovación social puede en ocasiones conducir a la innovación tecnológica y siempre debe contribuir a una mejor sostenibilidad de la empresa y de su entorno. Las estrategias de innovación social le deben permitir a la empresa crear valor económico y valor social de forma coordinada.
7.- La internacionalización de las PYMEs representa un riesgo al enfrentarla con un proceso de asimilación de la diversidad cultural y social más intenso que en su entorno habitual, pero al mismo tiempo una oportunidad de consolidar y mejorar su competitividad. La implantación en países emergentes y en desarrollo debe hacerse de forma socialmente responsable.
8.- La expansión de negocios hacia países emergentes y en desarrollo debe tener como marco de referencia los compromisos del Pacto Mundial y el respeto a los derechos humanos.
9.- En los procesos de internacionalización, las PYMEs y las empresas en general deben exigir estos comportamientos medioambientales y socialmente responsables a todos los eslabones de su cadena de valor.
10.- En el ámbito de la internacionalización, la experiencia de los empresarios indica que aquellos que lo hacen con coherencia, aplicando códigos de valores éticos y responsables, no transigiendo con la corrupción y operando con buenas prácticas son los que finalmente perduran en el largo plazo. La UE formenta que las empresas en procesos de internacionalización garanticen el marco mínimo de RSE como denominador común en todos los países donde operen.
11.- Los comportamientos socialmente responsables deben “cotizar” y ser tenidos en cuenta tanto por las entidades financieras en su gestión del crédito, como por las Administraciones Públicas, las grandes empresas y las PYMEs en sus concursos y peticiones de oferta a otras empresas.
12.- Existen alternativas a la financiación clásica para PYMEs. Algunas de ellas son: iniciativa RSE-PYMEs del Pacto Mundial, mercado alternativo bursátil; préstamos participativos; financiación a través de los grupos de interés (proveedores, clientes…) basada en la confianza.
13.- La cadena de valor constituye una excelente forma de transmisión de la cultura de RSE y de implantación de la misma en las PYMEs.
14.- La diversidad es una realidad en nuestra sociedad y debe ser entendida por todas las empresas como una oportunidad.
15.- La diversidad dentro de la empresa es un factor enriquecedor y constituye uno de los pilares básicos de los comportamientos socialmente responsables de las empresas.
16.- Las diferencias en la forma de pensar y trabajar pueden ser un activo importante si se gestiona adecuadamente y se le saca el máximo provecho dentro de la empresa. Una gestión adecuada puede conducir a mejoras de calidad y productividad.
17.- Un grupo de interés clave en cualquier empresa lo constituyen los empleados. Los procesos de RRLL y RRHH deben estar enmarcados en principios de responsabilidad social.
18.- La gestión socialmente responsable de las RRLL y los RRHH aumenta la motivación y mejora la identificación de los empleados con los objetivos de la empresa.
19.- Herramientas como la transparencia, el código de conducta, la política activa de conciliación de la vida familiar y laboral, la gestión proactiva de los riesgos en el trabajo, las acciones de voluntariado corporativo, la gestión de la diversidad, la política de igualdad y otras deben formar parte de la gestión socialmente responsable de los RRHH y de las RRLL.
20.- Los medios de comunicación además de ser empresas socialmente responsables, deben aprovechar su capacidad de llegar a los ciudadanos para difundir el conocimiento de la RSE en la población general y en las empresas.
Pero además, los ciudadanos les debemos exigir un uso socialmente responsable de la información
Fuente: Web oficial del 3º Congreso Nacional de RSE
