La utilización de herramientas 2.0, tanto por los profesionales como por los ciudadanos, se muestra como una vía de apoyo para el cambio de paradigma de la atención social y sanitaria a las personas. En este nuevo paradigma el paciente está en el centro de los procesos y se implica en el cuidado de su salud, desde la prevención al tratamiento. Además, el diálogo entre profesionales se ve reforzado para facilitar una visión multidisciplinar de la historia de cada paciente.
En esto coincidieron los expertos reunidos ayer en Toledo en el marco de eCLM 2012, iniciativa impulsada por el Gobierno de Castilla-La Mancha y Telefónica para definir las estrategias y las acciones necesarias para contribuir, de una manera decidida, a la mejora de la competitividad de Castilla-La Mancha gracias a la aportación de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación. eCLM 2012 se centra en cuatro ejes fundamentales: educación, sanidad, productividad y eficiencia energética.
En la segunda reunión de la Mesa de Sanidad se han determinado los ejes prioritarios de actuación para promover la continuidad de la atención social y sanitaria. A partir de estos ejes deben proponerse proyectos concretos de actuación. Estos ejes ponen especial énfasis: en las personas, su acercamiento e implicación con el sistema socio-sanitario; en las políticas, desarrollando aquellas que dinamicen el cambio de la organización socio-sanitaria con criterios de sostenibilidad; en los procesos de atención, buscando la mejora de su eficiencia, su calidad y su alcance; en los profesionales, contribuyendo al fortalecimiento de sus capacidades; y en los proveedores TIC, implicándoles en los procesos de cambio y buscando su colaboración en la reducción de la brecha digital y en la consolidación de las tecnologías de la información y de la comunicación como plataforma de integración con el ciudadano y de valor añadido para su bienestar.
Tras un intenso diálogo en el que se han valorado todas las iniciativas planteadas por los expertos participantes, se han planteado numerosos proyectos concretos, que habrá que priorizar, y cuya aplicación tendría un gran impacto en el sistema socio-sanitario. Entre ellos, cabe destacar la integración en una Base de Datos Poblacional única de la información social y sanitaria del ciudadano; la creación, basada en el anterior, de una Historia de Salud Consolidada, conteniendo todos los aspectos de la atención social y sanitaria; y la creación de un gestor de Guías Clínicas y Protocolos Sociales que garantice la uniformidad de la atención a la persona en todo el ámbito de la región.