Origen del Día de las Pymes
El 27 de junio se celebra el Día de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas, tras ser designado así por las Naciones Unidas para poner en valor que este tipo de organizaciones empresariales cuentan con el potencial de transformar economías, fomentar la creación de empleo y promover el crecimiento económico equitativo.
¿Pero por qué se celebra esta jornada?
En una resolución aprobada por la Asamblea General de la ONU el 6 de abril del año 2017 se “decide designar el 27 de junio Día de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas”.
En ese mismo documento de la ONU se “invita a los Estados Miembros a que faciliten la celebración del Día fomentando la presentación de investigaciones, los debates sobre políticas, los talleres de profesionales y los testimonios de empresarios de todo el mundo, en la medida de lo posible, en colaboración con organizaciones de los sectores público y privado y sin fines de lucro, y destaca que el costo de todas las actividades que puedan derivarse de la aplicación de la presente resolución deberá sufragarse mediante contribuciones voluntarias”.
Esta jornada del 27 de junio no debe confundirse con el Día Europeo de las Pymes, que se viene celebrando desde fechas anteriores. Concretamente, tras ser creado en el año 2008 por la Comisión Europea, una de las principales instituciones de la Unión Europea, y conmemorándose el 12 de mayo en los 27 países que forman parte de la UE.
Qué es una pyme y qué tipos existen
De acuerdo con la legislación europea, las pymes (o MIPYMES, si se incluyen las microempresas) se pueden subdividir en microempresas, pequeñas empresas y medianas empresas:
- Microempresas. No más de diez personas empleadas y una facturación anual o balance en ese mismo periodo de tiempo que no supere los dos millones de euros.
- Pequeñas empresas. Una plantilla inferior al medio centenar de personas y un balance o facturación anual que no sobrepase los 10 millones de euros.
- Medianas empresas. Con un número de trabajadores que no supere los 250 y un volumen de negocios anual no superior a 50 millones de euros o con un balance general en ese mismo periodo de tiempo que no exceda los 43 millones de euros.
Importancia de las pymes
La importancia de las microempresas y de las pequeñas y medianas empresas se observa en que representan nueve de cada diez empresas en el conjunto mundial, generando entre el 60 y el 70% del total de empleo para un 50% del PIB de ámbito planetario, según datos de la ONU.
La organización con sede en Nueva York incide también en que este tipo de empresas que cuentan con menos de 250 personas trabajando en ellas ejercen como columna vertebral de las diferentes sociedades en las que están presentes mediante su contribución a las economías tanto locales como nacionales.
De hecho, la estimación para el año 2030 es que se necesitarán 600 millones de empleos a escala planetaria para poder absorber la fuerza laboral creciente, por lo que el desarrollo de estas empresas es de gran importancia.
Uno de los problemas a los que se enfrentan las pymes es el acceso a la financiación, un escollo que varía en función del nivel de desarrollo económico de los diferentes países. Concretamente, el 41% de las pymes de los países menos adelantados, según recoge la ONU en su página web, consideran difícil el acceso a la financiación, unos datos que descienden hasta el 30% en los países de renta media y hasta el 15% en los países de renta alta.