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La comunicación en el ámbito laboral y su influencia en la gestión empresarial

La comunicación influye de forma directa en la gestión empresarial. La comunicación es clave para fortalecer las relaciones internas, promover el compromiso de los profesionales, agilizar y optimizar la toma de decisiones en los equipos. Si la comunicación se utiliza de una manera eficiente, dará lugar a una mayor productividad y a tener unos objetivos mucho más alcanzables.

Descubre más sobre la comunicación en el ámbito laboral y su influencia en la gestión empresarial.

Lourdes Lázaro

Tiempo de lectura: 6 min

La comunicación es importante en todos los ámbitos de nuestras vidas. Una buena comunicación, permite generar un buen clima de trabajo y que los profesionales se sientan más participativos en las decisiones, permitiendo que su capacitación y su desarrollo aumente promoviendo su crecimiento profesional.

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Las ventajas de una buena comunicación

Son numerosas las ventajas que produce una buena comunicación en nuestro día a día. Algunos de los ejemplos más sencillos y muy recompensados son cuando expresamos algo tan sencillo como un simple “buenos días”, “buenas tardes”, “feliz día”, “¿cómo estás?”. Una comunicación bidireccional en los equipos consigue unos resultados excelentes de motivación, fomentando un ambiente cercano y relajado.

A través de la escucha efectiva, la comunicación tiene como objetivo conocer más a nuestro entorno, a nuestros compañeros de trabajo. Se trata de un aprendizaje continuo que nos ayuda a participar de ideas, opiniones y fortalecer el nexo entre todos ellos. Alguno de los resultados de éxito, es que refuerza la confianza para participar en foros grandes o pequeños y fortalece la autoestima en el crecimiento.

Aunque son numerosos los beneficios de la comunicación efectiva en el mundo empresarial, muestro a continuación, algunos ejemplos:

A través de una excelente comunicación es posible transmitir la cultura y la identidad corporativa a los trabajadores. No olvidemos que los profesionales de las compañías son los mejores transmisores y embajadores de las empresas en el mundo exterior, así que, cuanto mejor traslademos nuestra información como compañía a todos ellos, mejor fluirá la imagen hacia afuera de nuestras oficinas.

Cuando la comunicación es bidireccional contribuimos a generar confianza y a mantener las buenas relaciones entre los colaboradores y los altos cargos de una compañía. De esta manera, los posibles conflictos que se generen en los equipos o las dudas que se tengan en las funciones de trabajo tendrán una rápida respuesta para que la productividad aumente y se alcancen los objetivos fijados. Es importante abordar las conversaciones desde una perspectiva emocional.

La comunicación empresarial permite que los empleados estén informados de los objetivos y de la estrategia que persigue la compañía para conocer cómo deben actuar para contribuir con el cumplimiento marcado. Para ello se pueden utilizar medios escritos, orales o digitales promoviendo la utilización de las herramientas corporativas de cada compañía como Teams, Workplace u otros canales.

La comunicación siempre facilita la adaptación a cambios dentro de la organización en las empresas.

A través de la comunicación podemos potenciar los reconocimientos a los empleados, poniendo en valor el trabajo en su día a día.

Impulsar la participación en redes sociales corporativas, contribuye al desarrollo y mejora de una cultura empresarial, y se promueve la comunicación entre todos los profesionales que forman parte de una compañía, realizando un gran trabajo de networking entre todas las áreas.

Es importante que las empresas muestren transparencia en sus comunicados y pongan el foco tanto en sus clientes externos como en sus profesionales internos, porque cuando existe un equilibro interno y externo, el éxito está asegurado.

Las redes corporativas o canales digitales en las empresas tienen que servir para que la comunicación fluya de manera equilibrada entre todos los profesionales, de manera que los empleados se sientan cómodos y confiados para hablar, publicar y compartir sus dudas o consultas, y donde los altos mandos, tengan la oportunidad de conectar con los equipos de una manera más cercana.

Hay que conseguir que las compañías se conviertan en un entorno cercano, confiable, donde la seguridad y el compromiso de todos sus empleados vaya creciendo a cada momento. Hay que conseguir que la comunicación no sea una amenaza para nadie, tiene que resultar cómodo compartir y dialogar para conseguir objetivos de aprendizaje y de colaboración continuo.

Tenemos que ser capaces de no medir a nadie por el estatus que ocupa en una empresa, es decir, la posición no debería ser una barrera para no conseguir una comunicación efectiva. Deberíamos transmitir los mismos mensajes, sin distorsionar la información, a todas las personas de los equipos, para que se sigan las mismas directrices y se consigan los mismos objetivos.  Cuando confiamos en nuestros equipos, reconocemos su trabajo y permitimos que la comunicación fluctúe, la productividad aumenta.

Desventajas de una mala gestión de la comunicación

La escasez de comunicación en el mundo laboral da lugar a la insatisfacción dentro y fuera de las empresas, generando una repercusión negativa que afecta a las ventas y la productividad de sus equipos.

Si la comunicación no fluye entre los equipos, se generan conflictos por no tener claridad en las funciones o directrices y se pierde el compromiso necesario para desarrollar nuestro trabajo.

La desmotivación es un punto para tener muy en cuenta en la falta de comunicación, y es que, si no hay conexión entre los profesionales y los mandos, la motivación disminuye, dando lugar a situaciones conflictivas, malentendidos y en algunos casos a bajas médicas indeseadas.

Cuando no se permite la participación de los equipos en reuniones, en redes sociales corporativas, se les excluye de cualquier flujo de información, conseguimos un entorno negativo, desmotivado y bajo en productividad.

Conclusiones

En conclusión, creo que como profesional de Telefónica hemos conseguido avanzar mucho en cuanto a la comunicación bidireccional de los empleados y los mandos. Gracias a la gran evolución de las herramientas digitales y a la puesta en marcha del teletrabajo, hemos conseguido sentirnos más partícipes de todas las reuniones y foros.  Ahora podemos escribir a través de herramientas digitales, realizar llamadas comprobando si los profesionales están accesibles o no y tenemos la posibilidad de participar en redes corporativas internas de encuentros con directivos participando y mostrando nuestra opinión de forma libre.

La evolución de la comunicación tiene continuidad y hay que conseguir que fluya de manera natural, sin necesidad de trabajar a través de herramientas que obliguen a conseguir un encuentro forzado entre profesionales. El buen uso de la comunicación tiene como origen la naturalidad en todas sus versiones sin obligaciones ni directrices.

El acercamiento entre las personas tiene que ser un objetivo de todos con el único beneficio de sentirnos bien en un entorno empresarial, sin conflictos ni desmotivaciones.


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