El paradigma tradicional
A pesar de ello, aún convivimos con un paradigma tradicional, que dicta sobre la permanencia en un mismo sitio, realizando la misma tarea, hasta el final del período laboral establecido, como quizás lo concebían nuestros antepasados.
Esto paradigma, nace acorde a su tiempo. Los tiempos eran diferentes, y aún luego de la revolución industrial y sus transformaciones sociales, si lo visualizamos históricamente, el tiempo de las transformaciones tenían un margen diferente al de los tiempos actuales. Las personas tenían una capacitación específica en su tarea, la cual podría prolongarse por varios años, en general.
Ese paradigma tradicional, que se va desvaneciendo, aún convive con el actual, donde el cambio es la constante, y la formación continua en el entorno laboral, debe tener el foco.
El paradigma actual
En el presente, el entorno laboral no debería pensarse sin un marco de formación permanente, dado que resulta imprescindible en el contexto en el que vivimos.
No se trata sólo de adquirir conocimiento o perfeccionarnos para poder obtener una mayor empleabilidad, sino también de disponer y entrar en contacto con nuestras habilidades y talentos, cultivarlos de una forma consciente.
“La enseñanza, propiamente concebida, no es un sistema de transmisión. Uno no está allí sólo para transmitir la información recibida. Los grandes maestros hacen eso, pero lo que también hace un buen maestro es guiar, estimular, provocar, involucrar”. (Sir Ken Robinson)
Reskilling y el upskilling
Probablemente hayas oído hablar de reskilling y el upskilling, términos que han crecido con fuerza en los últimos tiempos.
El término upskilling tiene que ver con el proceso de aprendizaje de nuevas habilidades para un crecimiento fructífero, dentro de un rol determinado. Mientras que el reskilling se relaciona con el proceso de aprendizaje de habilidades para la adaptación a un nuevo rol.
Según el Foro Económico Mundial, más del 50% de las personas van a necesitar reciclarse, reentrenarse y adquirir nuevas habilidades para el año 2025. La disponibilidad de obtener un empleo dependerá del learnability, que es el nivel de “aprendibilidad” que nos propongamos.
Claro que no siempre resulta cómodo el estado de alerta que nos supone estar a la vanguardia de nuevas formas de empleabilidad. Pero debemos considerarlos como un estado de alerta en términos positivos, donde nuestro saber se expande y en donde somos capaces de permitirnos un estado de humildad suficiente, para reconocer que desconocemos un tema, pero contamos con la disponibilidad para descubrirlo.
¿Cómo acceder a una formación que nos permita una mayor empleabilidad?
En la actualidad, numerosas empresas poseen un espacio y programas específicos, donde se fomenta el acceso al aprendizaje continuo, con foco también en las tendencias del área.
En Telefónica, además de tener un plan de formación permanente para sus empleados, también se ofrece la disponibilidad, a través de Fundación Telefónica, en los distintos países donde se encuentra, por ejemplo, de propuestas como: cursos online y gratuitos para mejorar el perfil profesional, mapa de empleos, foro Conecta Empleo, 42, entre muchísimas propuestas, comprometidas en brindarle valor a la formación para el empleo, de cada sociedad.