La adopción digital podría resumirse como aquella parte de la transformación digital en la que los usuarios disponen de un nivel de competencia suficiente como para comprender y consiguientemente aprovechar por completo los beneficios que aportan las herramientas digitales.
Y es que ofrecer a las personas las capacidades, habilidades u oportunidades para no desaprovechar las ventajas del mundo digital es un paso más hacia la inclusión digital además de la premisa básica de facilitar y ampliar la cobertura en el acceso a Internet y a las soluciones digitales para aquellas partes de la población que todavía no lo disfrutan.
Una adopción de herramientas digitales que puede suponer un reto para personas de diferentes colectivos pero que sirve para ir cerrando la brecha digital.
Precisamente hablando de cerrar la brecha digital habría que puntualizar que podemos encontrar dos tipos diferentes de la misma: la de cobertura y la de uso.
En el posicionamiento sobre brecha digital de Telefónica, la compañía ofrece una serie de estrategias y propuestas con las que allanar el camino de la adopción digital, así como qué hacer para impulsarla.
Cómo posibilitar la adopción digital
Para avanzar hacia la adopción digital, hay que identificar qué posibles barreras pueden encontrarse. La falta de alfabetización y de competencias digitales, que los servicios y/o los dispositivos cuenten con precios asequibles o la disponibilidad de contenidos y servicios accesibles pueden ser algunas de ellas.
Posibilitar la adopción digital pasa por el acceso a Internet como primer requisito para la integración en la era digital. Para ello, cuatro palancas clave pueden ayudar a abordar las brechas de uso:
- Competencias digitales, fundamentales para participar y desarrollarse en la era digital. Dotar de las mismas a todas las personas independientemente de su situación socioeconómica, su edad, su género o su procedencia geográfica es clave para acabar con la brecha digital.
- Asequibilidad, tanto en la posibilidad de acceder a dispositivos de calidad suficiente como para un uso en condiciones como en las tarifas de acceso a Internet.
- Confianza digital. Fraudes online, estafas o hackeos son otras cuestiones que pueden desembocar en una falta de confianza digital que lleve a que haya personas que no se sientan con necesidad de conocer el mundo digital. Por ello, aumentar los estándares de seguridad y privacidad para acabar con esta desconfianza es otra cuestión de relevancia a la hora de avanzar hacia la adopción digital.
- Contenidos y servicios digitales de interés. La ausencia de contenidos relevantes por diversas razones -como la falta de adaptación, disponibilidad o diversidad en los contenidos o servicios digitales- hace que sea más complicado que los hogares o personas no conectados tengan interés en acceder a Internet al no encontrar posibles beneficios en hacerlo.
Cómo impulsar la adopción digital
Asimismo, desde la operadora se presentan cuatro diferentes propuestas con las que ayudar a dar un impulso a la adopción digital vinculadas a las cuatro palancas clave que acabamos de revisar en el apartado anterior.
Colaboración público-privada
Con el objetivo de alcanzar la igualdad de oportunidades en el acceso al mundo digital, la colaboración entre los ámbitos público y privado puede apoyar la aceleración de la alfabetización y las competencias digitales a través de la incorporación de la materia a los sistemas educativos o con la promoción del aprendizaje permanente con el que impulsar la empleabilidad.
Dispositivos y accesos asequibles
Partiendo de la base de que tanto la conectividad como la utilización de dispositivos es imprescindible, resulta de gran relevancia otorgar mecanismos que hagan que el acceso a los citados dispositivos o a Internet sea a un precio accesible para el conjunto de la sociedad.
Servicios accesibles y contenidos relevantes
El fomento de contenidos y servicios locales adoptados a las diferentes realidades culturales de los distintos países puede ser un aliciente que por cercanía o proximidad cultural anime a acercarse a nuevas herramientas digitales a personas que de otra manera consideran que no tienen ningún aliciente para hacerlo.
De igual manera, garantizar la accesibilidad a personas que puedan contar con algún tipo de discapacidad también puede ser un trampolín hacia el uso de las posibilidades que ofrece la era digital.
Gobernanza fiable y responsable
La seguridad o la privacidad se presentan como unos atributos que deben estar sí o sí vinculados a la sociedad digital. De lo contrario, si la gente percibe riesgos, se corre el peligro de que la brecha digital se amplíe.
Priorizar la capacitación o tener en cuenta a colectivos o comunidades con elevada vulnerabilidad debe ser otra prioridad a tener en cuenta para alcanzar un futuro digital que sea inclusivo aprovechando el potencial transformador que ofrece la tecnología.
En el proceso de digitalización, uno de los mayores retos es pues lograr una inclusión digital plena. Conoce nuestra Brújula.